lunes, 20 de septiembre de 2010

ÉrAse Una VeZ...

















Érase una vez, una niña con carita de manzana fresca y dulce a la que el sol dejó dorados en sus cabellos y las ninfas del mar regalaron el nombre.

Érase una niña alegre,vivaz,rápida,más incluso,que su propio pensamiento.

Érase una niña, que peinaba trenzas, porque como si fueran alas,le permitían correr más libre en sus juegos,y jugaba y jugaba... hasta caer rendida.

Érase una niña ,que pintaba nuestras vidas con flores,mariposas y soles,érase una niña,pintora de caballete y lienzo.

Érase una vez, una niña que cantaba ,que bailaba,que quería ser música.

Érase una vez, una niñita con carita de manzana dulce y fresca, que peinaba trenzas con lazos rojos, que abandonó en algún parque de su niñez, mudándolos por silencio adolescente.

Érase una vez una adolescente,que se miró al espejo deformado de sus miedos,su timidez,tal vez su soledad...

Érase una adolescente, que no se vió como la veíamos,preciosa, alegre,equilibrio,futuro... y flirteó peligrosamente con la comida.

Érase una vez, un espejo embrujado que la atrapa por instantes,del que a veces escapa.

Érase una vez, una adolescente silenciosa con dorados de sol en sus cabellos,érase una vez, una niña alegre, que canta...érase una vez una adolescencia.

Érase una vida en la que la adolescente y la niña con carita de manzada dulce y fresca, que peina trenzas con lazos rojos, se encuentran,se abrazan ,nos abrazan.

2 comentarios:

macuera dijo...

Un difícil trayecto éste de pasar de niña a adolescente, un trayecto en el que algunos dejan de ser esa niña dulce a ser alguien más complicado.
Paciencia es lo que se conseja...

Sílvia dijo...

no se puede explicar mejor...