domingo, 23 de agosto de 2015

El encuentro familiar

Hoy es el día D,el día después del encuentro familiar,y quizás hoy una se se siente más triste ,más vacía o tal vez, todo lo contrario,más colmada de sensaciones ,de alegrías,de besos, abrazos,risas, incluso de griterío infantil,de esa ya tercera generación, que se suma a este encuentro que con tan buen criterio se puso en marcha hace ya tres años y del que creo que todos estamos muy satisfechos.

Ayer fue todo, mi  familia y el paisaje de la niñez,Casas Nuevas .El tiempo nos ha moldeado a todos,y una descubre, que al igual que a los tíos,a los primos y a mi, las arrugas han surgido en las casa ,en los pajares, algunas tan profundas que las ha resquebrajado  dejando al descubierto  sus entrañas llenas de polvo y ausencias, y con el corazón en un puño, recompones el paisaje para que nada le falte,para que esa imagen que guardas durante tantos años y forma parte de ti, se mantenga.

y sin verlos sabes que están ahí, los pajares,repletos de la paja recién cosechada ,que los mulos trabadas sus patas, para que no escapen ,comen lentamente  en el verde de la era,que la acacia que te daba la bienvenida a la entrada de la aldea,se mece  por el aire seco castellano.

Y sigue el juego mental y piensas en el banco de piedra de la tía Gonzala ...y oyes el sonido cantarín del agua de la fuente cayendo libremente ,allí donde hoy los primos pequeños le dan a un grifo de manivela...
incluso pasan unas gallinas picoteando libremente por las calles.

Y entras en la iglesia blanca ,nueva,con un techo de madera que sustituye a aquel que cayó el año pasado tras las lluvias...y sabes, porque estuviste, que aquello fue la escuela ,cuando había niños a los que enseñar,una escuela que ante la evidencia de la falta de estudiantes ,hoy tiene otro uso,pero que nadie quiere olvidar que allí aprendieron a leer y a escribir por eso en una tapa de libreta de color verde , pegada justo en la entrada,se recuerda: Esto era una escuela ,donde  veníamos a estudiar.Hoy es una iglesia donde venimos a rezar...
Y van llegando, tantas personas que recuerdas, a las que no has visto hace muchos años,y la pequeña iglesia se llena,suena una salve rociera ...
 Madalenas bendecidas para todos,un regalo para el paladar de aquellos que volvemos,por lo menos una vez al año.

Pasan las horas a una velocidad de vértigo y es que el tiempo es tan subjetivo...meses que se hacen largos y días que se quedan muy cortos.
Imágenes grabadas en la retina ,aromas, sonidos,sensaciones para  la memoria...que se quedan ahí,pero sin esa fuerza de  aquellas otras de la infancia pérdida; .... la aldea recobra la vida ,y entran los carros,y cruzan los ganados hacia los corrales y veo a mis padre joven  con su morral y  el perro guardian al lado...los niños desocupados, juegan al escondite al atardecer y por las ventanas y puertas abiertas, huele a cena .
Todos estamos allí, aunque solo sea en mis recuerdos